miércoles, 4 de julio de 2012

La depilación durante el embarazo.

Las hormonas del embarazo como la progesterona afectan también al crecimiento del vello corporal.
Por lo general, durante el embarazo las piernas tienen menos vello y la depilación dura más tiempo.
Sin embargo, algunas mujeres embarazadas notan más vello facial y en la línea negra del abdomen.
Es mejor no depilarse este exceso de vello, pues de lo contrario saldrá con más fuerza.
Suele desaparecer casi siempre después de tener al bebé.
Si estás embarazada, escoge el método de depilación más inocuo y menos agresivo para la circulación sanguínea y para tu piel, que durante esta etapa experimentan numerosos cambios para mantener el embarazo.
Si estás pensando en la depilación definitiva, conviene que la dejes para después del parto.
Cera durante el embarazo
La cera caliente está contraindicada, salvo en las axilas, ya que puede favorecer la aparición de varices, una molestia frecuente en el embarazo debida a la progesterona (la hormona del embarazo).
Es mejor utilizar cera fría, aunque el tirón puede afectar también a las paredes venosas.
Aparatos caseros de depilación eléctrica
Este método no tiene ninguna contraindicación, ya que estos aparatos no afectan a las paredes venosas.
Pueden, sin embargo, resultar algo dolorosos, ya que extraen el pelo desde la raíz y la piel de la embarazada suele estar más sensible.
Cremas depilatorias
No existen estudios serios sobre sus efectos durante el embarazo. Parece que son inocuas si se utilizan ocasionalmente sobre zonas poco extensas de vello.
Métodos de depilación definitiva
Los métodos de depilación definitiva como el láser están contraindicados hasta que no existan más datos sobre sus efectos en el embarazo.

lunes, 2 de julio de 2012

Uso de fórceps o ventosas en el parto

El fórceps y la ventosa obstétrica son herramientas que se emplean para ayudar a la expulsión del bebé, en partos prolongados o que presentan alguna otra complicación. Sólo pueden utilizarse cuando la cabeza del feto ha descendido al canal del parto y si existen evidencias de sufrimiento fetal.

FÓRCEPS

El parto asistido por fórceps se realiza durante la fase de expulsión, cuando el cuello del útero está completamente dilatado y la cabeza del feto se encuentra en el canal del parto.
Los fórceps son una especie de pinzas grandes que se encajan a los lados de la cabeza del bebé, a la altura de las orejas. Los médicos suelen ayudarse con estas pinzas cuando la cabeza del feto no consigue seguir descendiendo por la pelvis de la madre, o cuando el bebé se presenta de nalgas o en posición posterior.
También se utilizan cuando las contracciones son demasiado débiles y en aquellos casos en los que la mujer ya no tiene fuerzas para seguir empujando, al final del parto.

VENTOSA OBSTÉTRICA

La ventosa obstétrica se utiliza en ocasiones como alternativa al fórceps. Las ventosas funcionan como un aspirador. El médico introduce la ventosa hasta fijarla en la cabeza del feto y, ayudado por las contracciones, va sacando el bebé hacia el exterior.
Al igual que los fórceps, las ventosas sólo se utilizan durante la fase de expulsión y sólo cuando existen evidencias de sufrimiento fetal o en el caso de prolongación excesiva del periodo expulsivo.

domingo, 27 de mayo de 2012

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La obesidad materna influye negativamente en el desarrollo cognitivo del bebe

Que la salud de la madre influye en el desarrollo de su hijo es algo que se sabe desde hace tiempo. Son muchas las recomendaciones que se hacen a una mujer embarazada; no fumar, llevar una vida sana, no beber alcohol. Ahora, a tenor de los datos de un estudio realizado en el Centro Médico Baptista Wake Forest (EE.UU.), habrá que tener especial cuidado también con la obesidad. Según el trabajo, que se publica en Pediatrics, la obesidad materna puede contribuir al deterioro cognitivo en los bebés extremadamente prematuros.
«Este estudio muestra que la obesidad no sólo afecta a la salud de la madre, sino que también podrían afectar el desarrollo del bebé».
A pesar de que en la última década los avances médicos han mejorado la tasa de supervivencia de los bebés nacidos con menos de siete meses, éstos siguen teniendo un alto riesgo de retraso en el desarrollo mental en comparación con los bebés nacidos a término.
El estudio ha analizado a 921 niños nacidos antes de las 28 semanas de gestación durante 2002 y 2004 en 14 centros. Los investigadores evaluaron la placenta de los bebés para identificar infección u otras anomalías; entrevistaron a las madres y revisaron sus expedientes médicos. A los dos años de edad se valoraron las capacidades cognitivas de los niños mediante una medida de uso común.

Los científicos encontraron que tanto la obesidad materna y la falta de educación secundaria se asociaba con deterioro de la función cognitiva temprana. «No estábamos especialmente sorprendidos por los factores socio-económicos, porque anteriormente ya se ha demostrado en repetidas ocasiones que las desventajas sociales predicen peores resultados en el recién nacido», Sin embargo,  el hecho de que la obesidad sea un factor determinante es de especial interés porque cada vez es «más frecuente» y es un factor «potencialmente modificable durante el periodo previo a la concepción y el embarazo».
La obesidad se ha relacionado con la inflamación, un evento que puede dañar el cerebro en desarrollo. Lo que no se sabe es si la inflamación relacionada con la obesidad en la madre se transmite al feto. «Son pocos los estudios que han abordado los factores prenatales de riesgo de deterioro cognitivo en los niños nacidos prematuramente». El objetivo, es utilizar la información de estudios como el éste para desarrollar tratamientos que eviten el deterioro cognitivo en bebés extremadamente prematuros.

Vía.ABC.es

Las gender-reveal party o como saber el sexo de tu bebe en una fiesta.

Conocer el sexo del bebé es uno de los momentos más emocionantes para los futuros padres algo que, al menos en España, se suele vivir en la intimidad de la consulta del ginecólogo. Pero todo puede cambiar y si no que se lo digan a los miles de estadounidenses que han convertido el momento de conocer el sexo de su hijo en una fiesta con familiares y amigos.

El método es sencillo. En torno a la semana 20 de embarazo la pareja acude a la consulta del médico para la revisión habitual. En este momento de la gestación ya es posible determinar con la ayuda de un ecógrafo el sexo del bebé. Es entonces cuando los futuros padres solicitan al facultativo guardar el secreto en un sobre cerrado que será entregar a un pastelero que hará una tarta con la que se podrá saber si el niño es un niño o una niña.
A partir de este momento empiezan los preparativos de la «gender-reveal party». Una vez fijado día y hora se invita a familiares y amigos que conocerán al mismo tiempo que los padres el sexo del bebé ¿como?, en el interior del pastel está guardado el secreto. Si el bizcocho es de color azul lo que viene en camino es un niño, si es de color rosa, una niña. En el caso de ser gemelos o mellizos el gasto es doble. Dos niños, dos tartas.

Son muchos los que han visto un filón en la celebración de estas fiestas y están haciendo negocio con ideas de todo tipo que van desde la decoración de la casa hasta las invitaciones para la esperada cita. También las pastelerías han visto florecer su actividad con tartas espectaculares.


Vía.ABC.es

La leche materna protege frente al VIH

Científicos del Duke University Medical Center en Durham (Estados Unidos) han descubierto que la leche materna puede generar anticuerpos neutralizantes que permitan inhibir el VIH, según los resultados de una investigación que publica en su último número la revista PLoS One.

El VIH se puede transmitir de madre a hijo a través de la lactancia materna, aunque esto sólo acaba sucediendo en uno de cada diez casos, algo «relevante porque los lactantes están expuestos varias veces al día a la leche durante su primer año de vida.

Ésta fue la causa que llevó al equipo a investigar la leche materna para ver si había en ella «alguna respuesta inmune que protegía al 90 por ciento restante». Para ello, reclutaron en Malawi a un grupo de madres lactantes con VIH y aislaron en su leche los anticuerpos de las células inmunes, los llamados linfocitos B, y observaron que eran capaces de producir anticuerpos neutralizantes contra el VIH en la mucosa.
«Este trabajo da las pautas de lo que una vacuna debe hacer para proteger a los bebés». Asimismo, también pueden ayudar a los investigadores a combatir la transmisión entre adultos, ya que han observado que los anticuerpos de la leche materna «también pueden obtenerse de otros tejidos», como el tracto gastrointestinal o el tejido vaginal.

Vía.ABC.es

domingo, 6 de mayo de 2012

La delgadez, un problema para tener un embarazo tranquilo.

Altura: 1,68 cm. Peso: 52 kilos. Parecen unas medidas ideales, por las que cualquier mujer firmaría. Pero tan bonita figura puede suponer tener un embarazo de riesgo, con la necesidad de más control ginecológico y tomar precauciones en el parto, como ha señalado recientemente un estudio del Hospital Universitario Virgen de las Nieves de Granada difundido por la agencia SINC.
El trabajo pone el foco de atención en la parte menos conocida de la influencia del peso en la fertilidad. Mientras que son muchos los estudios epidemiológicos que a lo largo de los años han demostrado que las mujeres con sobrepeso y obesidad tienen peores embarazos y dan a luz a niños con un mayor riesgo de mortalidad perinatal, acidosis o macrosomía fetal, es realmente desconocido el efecto de un IMC por debajo de 18,5 en mujeres gestantes.
Para estudiar sus efectos, el equipo analizó el embarazo de 3.016 mujeres, analizando su peso en la primera visita al ginecólogo tras el embarazo: el 86,1% tenía un peso normal, el 8,3% obesidad y el 5,5% delgadez extrema. Curiosamente, como describen en su artículo en 'The Journal of Maternal-Fetal and Neonatal Medicine', las mujeres más delgadas eran de media significativamente más jóvenes que las que presentaban un peso normal u obesidad, entre cuyas edades no había diferencia.
La mayor sorpresa en las más delgadas viene dada por una complicación de nombre imposible, los oligohidramnios, que indica una reducción del líquido amniótico en la recta final del embarazo. "Cuando la mujer está muy delgada suele ser porque come poco, por lo que el feto se alimenta poco dentro de útero y orina menos. Puesto que el líquido amniótico está constituido esencialmente por la orina del feto, es lógico que éste vaya disminuyendo".
Los oligohidramnios son un factor de riesgo en el embarazo y tienen una prevalencia en la población normal de alrededor del 3%. En la población analizada por el equipo, se observaron en el 3,6% de las mujeres con peso normal, el 4,4% de las obesas y el 8,3% de las excesivamente delgadas. Según la literatura médica, las mujeres con embarazos con oligohidramnios tienen más riesgo de dar a luz fetos muertos, más riesgo de que el bebé tenga que ser ingresado en la UCI y otras complicaciones.
"Lo que hay que saber es que con una mujer extremadamente delgada nos movemos con factores de riesgo". Por lo tanto, “es fundamental establecer un "protocolo de control y vigilancia".
Esto se traduce, en primer lugar, en que hay que cambiar el régimen de vigilancia. Mientras que lo habitual en la sanidad pública, explica este especialista, es prácticamente una visita por trimestre y una última cuando se cumple la fecha prevista de parto, en el caso de las mujeres muy delgadas "habría que intercalar un par de visitas más, sobre todo en la recta final del embarazo, para vigilar el crecimiento del feto". En segundo lugar, hay que hacer mucho hincapié en que estas mujeres sigan una dieta adecuada, que implica no bajar nunca de las 1.500 calorías, algo que puede no ser fácil para una persona con un IMC menor de 18,5. "Hemos de insistir, sobre todo, en que la alimentación sea variada y recomendar también suplementos vitamínicos y hierro".
Por último, los autores insisten en su estudio en que los ginecólogos han de concienciarse de la importancia de calcular el IMC de toda mujer embarazada o, lo que es lo mismo, no dejar que una bonita figura haga pasar por alto un factor de riesgo.